Descubra cómo se elabora el té con la ayuda de tecnologías como Vision AI para aumentar la velocidad, la uniformidad y la automatización de la recogida, la clasificación y el envasado de las hojas.

Descubra cómo se elabora el té con la ayuda de tecnologías como Vision AI para aumentar la velocidad, la uniformidad y la automatización de la recogida, la clasificación y el envasado de las hojas.
Para muchos de nosotros, el té es algo más que una bebida divertida. Es un ritual diario, una fuente de consuelo y un compañero tranquilo en nuestras rutinas. En Ultralytics también nos encanta el té, especialmente un matcha latte perfectamente batido.
Pero, ¿con qué frecuencia pensamos en cómo se elabora el té y cómo llega de los campos a la taza? Detrás de cada sorbo hay un proceso sorprendentemente complejo que implica una cosecha delicada, una clasificación cuidadosa y un envasado preciso.
A pesar de su popularidad mundial, la industria del té sigue dependiendo en gran medida de procesos de producción manuales. Desde la recolección y la selección hasta la clasificación y el envasado, muchos pasos críticos se realizan a mano. El resultado es una producción más lenta y, en ocasiones, una calidad desigual.
Los fabricantes de té están empezando a recurrir a la tecnología para satisfacer la creciente demanda y mejorar la eficiencia. Con la ayuda de la IA y la visión por ordenador, tecnología que permite a las máquinas interpretar y analizar la información visual, ahora pueden automatizarse muchos de los pasos manuales de la producción de té.
Por ejemplo, los modelos de visión artificial como Ultralytics YOLO11, que admiten tareas como la detección de objetos, la clasificación de imágenes y la segmentación de instancias, pueden utilizarse para identificar y clasificar hojas de té, detectar defectos y controlar la calidad en tiempo real. Estas capacidades pueden intervenir y agilizar las operaciones, reducir los errores humanos y mantener unos estándares de producto coherentes desde la granja hasta la fábrica.
En este artículo, analizaremos más de cerca cómo se elabora el té, por qué algunos métodos tradicionales pueden fallar y cómo la visión por ordenador está ayudando a aportar nueva velocidad, precisión e innovación a la forma en que se produce el té. Empecemos.
Antes de sumergirnos en cómo se elabora el té, echemos un rápido vistazo a la historia de cómo se hizo tan popular.
El té se disfruta desde hace miles de años. Su historia comienza en la antigua China, donde, según la leyenda, el emperador Shen Nong lo descubrió accidentalmente cuando cayeron hojas de té en su agua hirviendo. La gente no tardó en darse cuenta de que la bebida no sólo era refrescante, sino que también ofrecía beneficios para la salud. Con el tiempo, el té se convirtió en un elemento central de la cultura y la vida cotidiana chinas.
Desde China, el té se extendió a países vecinos como Japón y Corea. Cada región desarrolló sus propias costumbres y rituales en torno al té, convirtiéndolo en mucho más que una bebida.
En el siglo XVII, el té llegó a Europa a través de las rutas comerciales y rápidamente ganó popularidad, sobre todo en Gran Bretaña. Como beber té se convirtió en un hábito diario, los británicos establecieron grandes plantaciones en la India y Sri Lanka para satisfacer la creciente demanda. Esto contribuyó a que el té fuera más asequible y accesible en todo el mundo.
Hoy en día, la industria del té sigue prosperando, y el valor del mercado mundial del té alcanzará aproximadamente 75.500 millones de dólares en 2029. Miles de millones de personas disfrutan del té en todo el mundo y sigue estando profundamente arraigado en las tradiciones culturales y las rutinas diarias de muchas comunidades.
El té se elabora a partir de las hojas de una planta llamada Camellia sinensis. Ya sea té negro, verde, oolong o blanco, todos proceden de la misma planta. La diferencia clave entre estas variedades es cómo se procesan las hojas después de su recolección. Factores como el tiempo que se exponen las hojas al aire, cómo se secan y si se cuecen al vapor o se enrollan afectan al sabor y al estilo del té.
El proceso de producción del té comienza con la recolección de hojas jóvenes y frescas. Tras la recolección, las hojas se dejan marchitar. Este paso reduce la humedad y facilita su manipulación.
La siguiente etapa es el enrollado, que retuerce y rompe suavemente las hojas, liberando enzimas naturales que las descomponen. Esto provoca la oxidación del té. Cuando se exponen al aire, las hojas se oscurecen y desarrollan su sabor.
El té negro está totalmente oxidado, lo que le confiere un sabor intenso y un color profundo. Los tés verde y blanco sufren una oxidación mínima o nula, lo que les permite seguir siendo más ligeros y delicados. Tras la oxidación, las hojas se secan, clasifican y envasan.
Incluso hoy en día, la producción de té depende en gran medida del trabajo manual. Tareas como la recolección, la clasificación y el envasado siguen haciéndose a mano en muchas partes de la industria. Aunque estos métodos tradicionales se han utilizado durante generaciones, pueden ralentizar los flujos de trabajo y dejar margen para el error humano.
He aquí algunos de los retos más comunes a los que se enfrentan los productores de té:
En todas las fases del proceso de fabricación del té, es esencial comprobar la calidad de las hojas. Estas inspecciones suelen hacerse a mano, lo que puede llevar mucho tiempo y, en ocasiones, ser incoherente.
Las pequeñas diferencias en el tamaño, la forma o el color de las hojas de té pueden afectar al sabor y a la calidad general. Cuando se trabaja con grandes volúmenes de té, mantener una calidad constante en cada lote se convierte en un verdadero reto. Esto añade complejidad al proceso y puede provocar retrasos o errores.
La visión por ordenador es una solución fiable a estos problemas. Permite a las máquinas inspeccionar y analizar con rapidez y precisión las hojas de té.
Por ejemplo, se pueden entrenar modelos de visión artificial como YOLO11 para comprobar la clasificación de las hojas de té. De este modo, la calidad se mantiene constante en los distintos lotes. Del mismo modo, las máquinas integradas con YOLO11 pueden detectar y eliminar hojas dañinas, suciedad u otros contaminantes que podrían comprometer la calidad del té.
Ahora que entendemos mejor cómo se utiliza la visión por ordenador en la producción de té, vamos a explorar algunos casos de uso real en los que está marcando la diferencia en la industria del té.
En Hangzhou (China), donde se cultiva el conocido té Longjing del Lago del Oeste, la innovación de vanguardia está reinventando el cultivo tradicional del té. Durante la ajetreada temporada de cosecha, los agricultores utilizan herramientas avanzadas como drones, perros robot y exoesqueletos portátiles para hacer su trabajo más eficiente y menos exigente físicamente.
Una de las tecnologías más impactantes es la visión por ordenador. Drones equipados con sistemas de visión sobrevuelan los campos de té para controlar la salud de las plantas e identificar qué zonas están listas para la cosecha. En lugar de recorrer a pie toda la plantación, los agricultores pueden tener ahora una visión rápida y detallada de las condiciones del cultivo desde arriba, lo que ahorra tiempo y mejora la precisión.
Mientras tanto, en tierra, perros robot con cámaras incorporadas utilizan la visión por ordenador para recorrer caminos estrechos y empinados mientras transportan brotes de té recién recolectados. Esto ayuda a reducir la carga física de los trabajadores y acelera la entrega a las estaciones de procesamiento. Los agricultores también llevan exoesqueletos robóticos calibrados para soportar sus piernas y movimientos, lo que facilita el transporte de cargas como fertilizantes u hojas cosechadas por terrenos difíciles.
Del mismo modo, en otras plantaciones de té de China se están utilizando drones para rociar pesticidas, una tarea que antes se hacía a mano. Con ayuda de la visión por ordenador y el GPS, estos drones pueden identificar con precisión las zonas objetivo, evitar obstáculos y aplicar los pesticidas sólo donde es necesario. Esto hace que el proceso sea más rápido, más seguro para los trabajadores y más eficaz, sobre todo en zonas de difícil acceso o terreno accidentado.
En las fábricas donde se procesa el té, las máquinas clasificadoras se están integrando ahora con sistemas de visión por ordenador. Estas máquinas utilizan cámaras de alta resolución y técnicas de procesamiento de imágenes para inspeccionar las hojas de té a medida que avanzan por la línea de producción. Una técnica clave en este proceso es la segmentación de instancias, que identifica cada hoja de té individual en una imagen y dibuja un contorno claro a su alrededor, incluso cuando varias hojas se tocan o se superponen.
Basándose en características como la forma, el tamaño, el color y la textura, el sistema clasifica las hojas en diferentes categorías. Las hojas de buena calidad se separan de las que están rotas, descoloridas o son demasiado pequeñas. También se identifican y eliminan los materiales extraños, como tallos o restos. Este método aporta mayor coherencia al proceso de clasificación, reduce los errores humanos y favorece la aplicación de normas más estrictas en la producción de té a gran escala.
He aquí algunas ventajas de integrar la visión por ordenador en el proceso de producción de té:
Por otro lado, he aquí algunos retos que plantea el uso de la visión por ordenador en la producción de té:
La visión por ordenador está cambiando la forma de producir té. Ayuda en tareas como la clasificación de hojas, la búsqueda de objetos extraños y la inspección de envases. Estas herramientas mejoran la velocidad y la precisión del procesamiento del té, al tiempo que reducen los errores humanos.
Desde el campo hasta la fábrica, la visión por ordenador permite una pulverización más segura, una planificación más eficaz de la cosecha y productos finales más limpios. Mientras la demanda de té sigue creciendo, estas tecnologías ofrecen un método más inteligente y coherente para producir té de alta calidad a gran escala.
Únase a nuestra comunidad y al repositorio de GitHub para obtener más información sobre la visión por ordenador. Visite nuestras páginas de soluciones para explorar más aplicaciones de visión por ordenador en conducción autónoma e IA en logística. Consulte nuestras opciones de licencia y empiece a utilizar la visión por computador hoy mismo.